Redacción Mundo - 22-05-09
Suu Kyi
Al levantarse la cuarta vista, del edificio penitenciario no salieron embajadores ni periodistas, como ocurrió este jueves, para contar lo sucedido en la sala y qué aspecto tenía la opositora birmania, cuyo estado de salud había despertado preocupación durante las últimas semanas hasta que se la vio con buen aspecto y ánimo.
Según una radio de la disidencia, Suu Kyi llegó tarde a la sesión, que empezó sobre el mediodía, y su abogado, Kyi Win, abandonó la penitenciaría en torno a las 16.30 hora local (09.30 GMT) en un vehículo. En el exterior de Inseín, y entre fuertes medidas de seguridad, miembros de la Liga Nacional por la Democracia (LND), la formación política de Suu Kyi, protagonizaron otra protesta pacífica y callada.
Fuentes de la LND, indicaron que, tras la "apertura de ayer a un reducido público, el juicio retoma la dirección marcada por el Gobierno". Las autoridades militares abrieron la tercera vista a 25 diplomáticos europeos, asiáticos, y de Estados Unidos, así como a una decena de periodistas birmanos, la mitad de estos de medios de comunicación vinculados al régimen presidido por el general Than Shwe.
La líder birmana agradeció a las nuevas caras su apoyo y pudo hablar después con varios diplomáticos, algo que durante los últimos seis años ha tenido prohibido, bajo los términos del arresto domiciliario que cumple desde 2003, el último de los tres que le ha impuesto el régimen militar desde que en 1988 regresó a Birmania y se puso al frente de la oposición.
La parcial apertura de la vista se produjo el mismo día en que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas tenía previsto hablar de la situación de Suu Kyi. La acusación y el juicio a la Nobel de la Paz han sido calificados por la LND de pretexto para mantener encerrada a la opositora, a quien le quedaban dos semanas para que expirara el arresto domiciliario.
Las autoridades imputaron formalmente a Suu Kyi la semana pasada el incumplimiento de los términos de su detención por permitir a principios de mayo la estancia en su casa de Rangún al intruso John William Yettaw, un estadounidense de 53 años, que fue detenido el 6 de mayo tras abandonar la vivienda y cuando regresaba a nado por el lago Inya. De ser declarada culpable, puede ser condenada a una pena de hasta cinco años de privación de libertad lo que le impediría concurrir a las elecciones parlamentarias que la Junta Militar organiza para 2010.
La última vez que se celebraron comicios legislativos en Birmania, en 1990, Suu Kyi cumplía también arresto domiciliario y la LND ganó con más del 82 por ciento de los votos válidos emitidos, un resultado que la Junta Militar nunca ha reconocido. La LND cree que el juicio, donde se escucharán los testimonios de 22 testigos, concluirá la semana próxima, porque las autoridades quieren acelerar el proceso.
El embajador del Reino Unido para Birmania (Myanmar), Mark Canning, uno de los que ayer entró en la sala de justicia, dijo a la salida que en su opinión "el final está ya escrito". Los militares gobiernan en Birmania desde la asonada de 1962.
No hay comentarios:
Publicar un comentario