MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -El juicio contra la líder opositora birmana Aung San Suu Kyi por presunta violación de las condiciones de su arresto domiciliario concluyó hoy su última sesión de declaraciones de los testigos y el próximo día 24 de julio el tribunal escuchará los argumentos finales de la defensa y la acusación, tras lo cual quedará visto para sentencia. En la sesión de hoy, el tribunal de distrito de Rangún escuchó la declaración del jurista Khin Moe Moe, el único testigo que le queda a la defensa de Suu Kyi, según informaron fuentes jurídicas. El testimonio se extendió durante siete horas.
Nyan Win, el abogado de Suu Kyi, indicó que la defensa ya ha terminado de redactar el texto del argumento final, que consta de 18 páginas. Según explicó, la propia líder opositora lo revisado la versión original y le añadió cuatro páginas.
Win añadió que el veredicto será anunciado después del 24 de julio, ya que la legislación birmana prohíbe anunciar la sentencia el mismo día de los argumentos finales.
El abogado también informó de que la premio Nobel de la Paz ha estado presente en la sesión de hoy, que ha sido a puerta cerrada. "Hemos estado con ella en el juicio y tiene buena salud", declaró a la agencia Reuters.
Suu Kyi fue acusada después de que se conociera que un estadounidense, John Yettaw, pasara dos días en su casa de Rangún el pasado 4 de mayo, cuando se encontraba bajo arresto domiciliario. La líder opositora dijo que en un principio no supo de la presencia de Yettaw y que luego le pidió que se fuera pero que éste no quiso. Suu Kyi se enfrenta a una condena de hasta cinco años de cárcel si es hallada culpable.
El hecho de que el juicio se reanudara hoy confirma que la Junta Militar ha desoído el llamamiento del secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, a los dirigentes de la Junta Militar que gobierna el país para que retiraran los cargos.
Ban visitó Birmania durante dos días hace una semana y reclamó al líder de la Junta Militar, el general Than Shwe, que liberara a Suu Kyi y a los más de 2.000 presos políticos. Su petición de ver a la líder opositora fue rechazada y se marchó del país sin que le dieran garantías de llevar a cabo reformas democráticas.
Por su parte, los líderes del partido de Suu Kyi, la Liga Nacional para la Democracia (LND), se quejaron estos días de que durante la visita de Ban pudieron reunirse con él, pero que no les fue posible hablar de la situación política de Birmania. En un comunicado emitido ayer, el LND explicó que Ban mantuvo un encuentro de sólo diez minutos con diez representantes de partidos políticos.
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