El ataque se produjo el lunes de la semana pasada en el pueblo de Kaw Hta, unos 170 kilómetros al norte de Rangún, cuando los militares dispararon contra la población y mataron a la mujer, de 35 años, una niña de 5 y un bebé de 5 meses, dejando malherida a la madre.
Desde el pasado enero, unas 3.000 personas de la minoría karen siguen ocultas en las selvas cercanas a Kaw Hta por las incursiones del Ejército, que han dejado un saldo de seis muertos y más de 200 viviendas destruidas.
En 2009, la Junta Militar birmana intensificó los ataques contra las minorías étnicas, que representan casi el 30 por ciento de la población y se asientan en las regiones fronterizas.
Free Burma Rangers, fundado en 1997, lleva a cabo misiones humanitarias en favor de las etnias karen, karenni, shan, pao, arakan, kachin, chin y lahu.
Los generales que gobiernan Birmania desde 1962 firmaron una tregua con la mayoría de las guerrillas que operan en el país en los años 80 y 90, aunque algunos grupos como los karen llevan en pie de guerra desde 1948.
Durante décadas, los militares birmanos han usado los trabajos forzados, las violaciones y la tortura para someter a las minorías étnicas.
Medio millón de desplazados karen, shan y karenni malviven en la zona oriental de Birmania, mientras que 140.000 están refugiados en Tailandia.
El régimen birmano ha anunciado elecciones para finales de este año, una iniciativa que ha sido recibida con escepticismo por los grupos opositores y étnicos. EFE/ABC